Detrás del reciclaje inclusivo

El Rol de las Personas Recicladoras

Representan una parte fundamental de la economía informal y desempeñan un papel clave en la gestión de residuos y la conservación del medio ambiente. Sin embargo, esa misma informalidad hace que no existan muchos datos con respecto a su actividad. R4S, en sus más de 13 años trabajando con personas recicladoras de América Latina y África, ha podido constatar que el impacto de su actividad se refleja en múltiples aspectos. Uno de los más importantes y menos reconocidos es el ahorro que su trabajo genera a los municipios, ya que evitan la recolección por parte del servicio municipal de toneladas de materiales reciclables y reducen los costes de gestión final de esas mismas toneladas.

«Los recicladores evitan que toneladas de materiales reciclables terminen en los vertederos, ahorrando costes a las ciudades.»

Ahora, para realizar su trabajo, las personas recicladoras de base incurren en una serie de gastos durante la ejecución de su actividad que nadie les reconoce -de hecho, muchas veces ni siquiera se reconoce que realizan un trabajo, pero eso sería objeto de otro artículo.

Los Costes de la Recolección

Si bien los datos de sus costes en muchos casos son desconocidos, son de crucial importancia para revindicar la mejora de sus condiciones laborales, siendo una herramienta clave para la administración interna de la asociación, así como para negociaciones externas.
– Internamente, conocer los gastos que asumen les puede ayudar a priorizar los materiales según el margen de beneficio que les brinda.
– Externamente, este dato es crucial para negociar precios de venta con empresas compradoras, así como asegurar un pago por servicio con las autoridades públicas, quienes con frecuencia justifican la ausencia de un pago con el ingreso que estas personas reciben por la venta del material, sin reparar en que también tienen costes que van más allá del tiempo que dedican a la recolección, clasificación y preparación para su venta.

De hecho, los gastos de su actividad son fácilmente clasificables cuando se desglosan según sus fases de la cadena de valor de los materiales reciclables: costes de recolección, de almacenamiento y de transformación. Estos varían según el tipo de transporte y los insumos utilizados, el alquiler del depósito, los servicios básicos, la maquinaria y el mantenimiento de esta, entre otros. Además, es importante calcular el tiempo que se dedica a la actividad. Es habitual en el sector informal no tener en cuenta el tiempo ni la cantidad de personas que están invirtiendo dicho tiempo en la actividad. Se trabaja mucho en núcleos familiares, con lo cual es común que toda la familia apoye a la cabeza de hogar sin que sus horas de trabajo se contabilicen.

Conociendo los gastos nombrados anteriormente, las asociaciones pueden conocer cuánto les cuesta recoger cada kilo de material y qué margen de beneficio obtienen por la venta de este, lo cual les proporciona una herramienta clave para mejorar la eficacia de su trabajo, reducir el riesgo de pérdidas y maximizar sus beneficios. Para este cálculo, a parte de los costes que tiene la asociación, tienen que considerarse el tipo y la cantidad de material recolectado, así como el precio de venta de cada material. Este ejercicio crea una priorización clara de materiales para la asociación, ya que todos aquellos materiales cuyo precio de venta quede por debajo del costo de recolección tendrán un margen de beneficio negativo y dejarán de ser una prioridad para la asociación.

Sin embargo, hay otros aspectos cualitativos de la recolección a tomar en cuenta y que pueden generar alteraciones de la prioridad que determinaría únicamente el beneficio del material recolectado. Entre ellas se podría nombrar:
– La facilidad con la que se encuentra el material.
– La densidad del material.
– El cuidado que requiere el material.

Todo esto se puede apreciar por ejemplo en el caso del cartón y el PET en Bolivia, donde estos materiales que generan un beneficio muy bajo son los más recolectados.

Costes y Margen de Beneficio

En el caso de El Porvenir, formada por 24 personas, se han medido los costes e ingresos asociados a su actividad. La asociación tiene un costo de recolección que oscila entre 1,3-2 Bs/Kg (0,2-0,3 €). El material más recolectado por esta asociación es el PET, seguido del cartón.

Analizando el precio de venta de los materiales y comparándolo con el costo de recolección por quilo, se identifica que el PET y el cartón son los materiales con menos margen de beneficio. En el caso del cartón, su precio de venta es 1,9Bs/Kg (0,26€), mientras que en el caso del PET el precio oscila entre 1,8-2,4Bs/Kg (0,24-0,33€), siendo el tipo de plástico con menor margen de beneficio.

Otros Aspectos Cualitativos

Aquí entran en juego los aspectos cualitativos de los que se hablaba anteriormente. Según la última caracterización de residuos de Santa Cruz, el cartón es el material reciclable más generado en la ciudad. A pesar de tener un precio muy bajo y ser un material muy delicado – si se moja pierde valor – se encuentra con facilidad en las calles de la ciudad, dado que es un centro regional de comercio minorista, con lo cual no requiere un esfuerzo adicional de búsqueda.

El caso del PET es muy similar, se trata de un material fácilmente identificable y que en la mayoría de los casos no requiere de limpieza, ya que el ciudadano lo identifica como reciclable y no lo mezcla con otros residuos, no se da la misma situación con otros plásticos. Si bien tiene un volumen muy elevado con relación a su peso, recolectar PET no supone un esfuerzo adicional, como sí lo es recolectar otro tipo de plástico, que se encuentra en muchos casos mezclado en el contenedor de los residuos no reciclables.

Ahora, ¿cómo se trasladan todos estos datos al beneficio percibido por la asociación? La asociación está formada por 24 personas, las cuales reciben un pago fijo de 1.680Bs (227,29€) mensuales. Este pago queda por debajo de un salario mínimo, el cual actualmente se sitúa en 2.362Bs (318,55€). La asociación recupera un promedio de 28 toneladas de material reciclable al mes. Tomando en cuenta que el municipio tiene un costo agregado de 37,42€ por tonelada de material recolectada y depositada en el vertedero, el Porvenir genera un ahorro de 1.047,74€ al municipio, que anualmente representa 12.572,65€.
Si el municipio reconociese el servicio que estas personas están realizando, podrían revertir parte de este ahorro en un pago por servicio, que apoye a las personas recicladoras a tener ingresos más dignos.

Si bien en el caso del Porvenir este pago no sería suficiente para llegar a un salario mínimo, sigue siendo sumamente importante, ya que representa casi un incremento del 20% sobre su salario actual.

En conclusión, realizar un análisis de los costes asociados a la recolección de materiales reciclables ofrece una visión más clara sobre la economía de las asociaciones de personas recicladoras de base y como mejorar sus ingresos. El caso de la asociación El Porvenir, ilustra la importancia de considerar tanto los aspectos cuantitativos como cualitativos en la gestión de residuos y la toma de decisiones estratégicas, debiendo la asociación valorar recuperar no solo materiales accesibles sino materiales que les generen mayor margen para asegurarse un ingreso digno. Un análisis más amplio de los costes de recolección en toda la ciudad podría ofrecer nuevas oportunidades para fortalecer la posición de las personas recicladoras, promover prácticas más sostenibles en la cadena de valor del reciclaje y obtener reconocimiento municipal, que no solo tiene importancia por el reconocimiento social que implica, sino como hemos visto anteriormente, por el reconocimiento económico que debería acompañarlo.

El área de Negocios Inclusivos de R4S se dedica a apoyar iniciativas empresariales que generan beneficios económicos, sociales y ambientales para las poblaciones vulnerables. Para ello, ofrece servicios integrales que abarcan desde el análisis de mercados y la identificación de oportunidades hasta el diseño, implementación y evaluación de proyectos innovadores con impacto positivo. Uno de los sectores en los que se ha especializado es el reciclaje inclusivo, que busca mejorar las condiciones de vida de las personas recicladoras informales de residuos sólidos urbanos y contribuir a la gestión sostenible de los recursos. El área de negocios inclusivos de R4S trabaja con diversos actores, como empresas, gobiernos, organizaciones sociales y académicas, para desarrollar soluciones a medida que respondan a las necesidades y expectativas de cada contexto.

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